¿QUÉ ES?
Junto a los metatarsianos del pie discurren nervios encargados de dar sensibilidad y motricidad al pie. El neuroma de Morton es una degeneración del nervio digital plantar acompañado de una fibrosis. Usualmente se localiza entre el 3º y 4º metatarsiano (75% de los casos), aunque a veces se puede presentar entre el 2º y el 3º y raras veces se presenta en otras posiciones
Su incidencia es mayor en mujeres y puede presentarse a cualquier edad.
Los síntomas se dan gradualmente, principalmente aparece dolor y ardor en la zona afecta. En estadios más agudos podemos encontrarnos con hormigueo y calambres en los dedos y región metatarsiana. Estos síntomas suelen agudizarse con el uso de calzado de punta estrecha, tacones o en periodos largos en bipedestación pudiendo llegar a ser muy agudos y limitantes
CAUSAS
El origen de esta patología es la irritación por compresión del nervio interdigital, por lo que todo aquello que comprima la zona puede hacer que esta afección aparezca
- Sobrecarga mecánica , siendo la forma de pisar uno de los agentes causales más importantes
- Pie inestable
- Deformidades estructurales del pie: dedos en martillo, juanete..
- Adaptaciones posturales, existencia de algún foco que pudiese estar interfiriendo en el hemicuerpo afectado, es decir, tu cuerpo se ha ido acomodando con el paso de los años y poco a poco se ha ido descompensando.
- Acortamiento muscular que provoca un sobreapoyo metatrsal
- Uso de zapatos demasiado estrechos
- Uso de zapatos de tacón que provoca una dorsiflexión de los dedos con la subsiguiente irritación de los nervios interdigitales
- Traumatismos constantes del pie por deportes de impacto
- ….
¿CÓMO SE DIAGNOSTICA?
El diagnostico se realiza tras una exploración global del paciente y maniobras exploratorias especificas que pongan de manifiesto el neuroma. Las pruebas complementarias también están indicadas en esta patología, aunque cabe destacar que un 30% de los neuromas pasan desapercibidas.
¿QUÉ HACER FRENTE A UN NEUROMA DE MORTON?
La gran mayoría de las causas que provocan esta patología tienen su origen el pie, pero no es siempre así.
Ejemplo de un caso muy habitual:
Una patología ginecóloga (como por ejemplo podría ser una cistitis) podría llegar a generar una descompensación en la pelvis que por las cadenas musculares puede llegar a derivar en un neuroma de morton.
En este caso un abordaje desde la podología no sería tan efectivo, habría que buscar al especialista más adecuado.
Es por esto que en zutik realizamos una valoración biodinámica del cuerpo y la posible relación que puedan tener las adaptaciones del cuerpo con la zona afectada.
De esta manera reconoceremos si la patología tiene su origen en el pie o es una consecuencia a una alteración a otro nivel del cuerpo, y priorizaremos quien es el profesional oportuno que debe de llevar esta lesión en cada paciente para liberar la carga nociceptiva del nervio, produciendo una desinflamación local que le permita una pronta recuperación.
Autora del artículo: Nagore Rodríguez Sangroniz, podoposturóloga (nº colegiada 262)
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